La etiqueta energética debe estar claramente expuesta en cualquier punto de venta del aparato refrigerador con función de venta directa, como salas de exposición, ferias, ventas en internet , etc., es decir, en cualquier lugar en el que el potencial comprador pueda tomar en consideración la compra del aparato.

En cuanto a la posición de la etiqueta, no hay ningún requisito preciso, sino que el cliente tiene que poder verla claramente en todo momento.

Los minoristas de alimentación no están obligados a exhibir la etiqueta energética en sus establecimientos.