LA HISTÓRICA CARNICERÍA ROMANO SE RENUEVA GRACIAS A LA ELEGANCIA DE LOS MOSTRADORES EUROCRYOR
«Nuestra experiencia y tradición al servicio de la calidad que les ofrecemos cada día» es la promesa que siempre ha guiado a la familia Romano, una empresa familiar que cuenta con cuatro generaciones de historia siendo un punto de referencia en Bari para quienes buscan carnes y embutidos de alta calidad, producidos según las antiguas tradiciones de Apulia. Un compromiso que también se refleja en la completa remodelación del punto de venta, donde la tradición del arte culinario de la carnicería Romano se combina con la elegancia y la tecnología de las soluciones de Eurocryor, una marca del Grupo Epta.
«Mi pasión por la marca Eurocryor nació y se consolidó durante el Campeonato de Jóvenes Carniceros promovido por Federcarni», afirma Tommaso Romano - Presidente Regional de Federcarni para Apulia, que concluye: «En mi experiencia de utilización de la tecnología Eurocryor, pude experimentar el alto grado de innovación y fiabilidad de sus soluciones, que he deseado vivamente para abrir las puertas de mi tienda al futuro».
Bistrot Eurocryor, entre diseño e innovación
Los protagonistas de la exposición son los mostradores Bistrot de la familia Stili de Eurocryor, muebles refrigerados concebidos para dar a la tienda una identidad distintiva preservando al mismo tiempo la frescura y las propiedades organolépticas de los cortes finos y los embutidos. La solución se caracteriza por sus vitrinas rectas que permiten resaltar plenamente el surtido y facilitan el acceso de los operadores a la zona de exposición para las actividades de merchandising y limpieza. Además, la estética del Bistrot se ha personalizado combinando elementos que alternan referencias a la naturaleza y la modernidad.
Por último, se propuso Dynamic System, una innovación tecnológica patentada y concebida para preservar la integridad de la carne, manteniendo constante la humedad en el interior de la vitrina con valores superiores al 90% sin utilizar humidificadores.
El resultado final es un punto de venta acogedor, moderno y escénico, pero al mismo tiempo caracterizado por una estética esencial, capaz de conferir una imagen sólida de higiene, respetando plenamente los deseos del cliente.
